lunes, 8 de febrero de 2010

Caidos del Cielo




En el Cielo:

Sobre la tabla que cruza el universo de ideas
Cuidabamos todos el orden del mundo,
Mi fiel pareja siempre fué la Vida
Si alguna vez caía, luego de Gabriel,
A los dulces brazos de la Vida caería.
Muchas historias nuestras se decían,
Un nombre me dieron los hombres,
Jesús el hijo de dios decían los hombres
De la Vida decían llamabase María
El Uno que se cuenta en la Música
El Uno es el corazón de la Vida
Y en ella tal como perfecto se divide,
En tres ideas su alma fué dividida
Así quicieron verla, así destruyeron mi Vida.
Así los hombres y dios vieron la sangre
Así erraron en el egoista desconzuelo
Así Jesús, dios y los hombres cayeron.
Dulce vida, algún dia espero volvete a ver
Algún dia espero que seas de nuevo
Pero no que seas mia sino que sincero
Vuelvas a ser en el cielo, mi mejor amiga.





En la Tierra:

Bramaba Samael, bramaba sus pasiones,
Estremecía la tierra en secretos de silencio
Encontraba el equilibrio en el ser perfecto.
A la sociedad se entregaba por completo
En la lucha por el bienestar del hombre los unía
Iscariote le dieron por nombre como ajeno
Más en su rostro la fuerza de la verdad se veía
De dios un pedazo quedaba en su alma
De dios la mala forma nutría sus sentimientos
Buscabase Lucifer en el bramido eterno
Crecía Samael en el hermano más certero.
Con fuego se hacía señales perfectas,
Pues si no es perfecto, que es el elemento?
Hacia las estrellas eran enviadas las luces
Como la clave del mensaje en morse
A miles de años se adelantaba y veía
A si mismo como el pastor del rebaño
Corderos de almas secas, dulces y sinceros
Ojos negros redondos, oídos atentos
Devían escuchar los corazones,
Pero preferieron escuchar los pensamientos,
Así se hacían ricos, así eran más perfectos
Basta con un sentimiento en el cuerpo
Y ya serían un tanto mas perfectos
Pues así son los sentimientos
Así, como lo son los de la vida Emo
Amantes de la muerte hoy en dia
Dedicados amantes de los sentimientos
Dulces y hermosos como son ellos
Deberían haber sido en su tiempo los corderos.
Pero es así que en ese entonces
Los hombres no fueron perfectos
Ni los caidos ni los que los siguieron
Cuando será ahora en la tierra el Cielo?.





Ahora desde el cielo:

Ojos dulces y rasgados buscan la Verdad
Ojos con los colores de la hiedra y su madre
Iris que recordando la Naturaleza van,
Recordando la Lluvia y el Claro de la Luna.
En la visión de las tormentas del Tiempo
Tus lágrimas caen al suelo,
Así veo todas las Noches
Mirándome en las manchas de estrellas.
Cómo viajan los sentimientos
Hacia la profunda calidez del cielo
Así es cómo se aloja en tu corazón
El amor concebido por el Universo,
Para nutrir todas las raices
Que sientes bajo tu piel sincera
Con la sangre que has derramado
En aquel corazón cerrado,
En sus dulces ojos que se cerraban
Y volvían a abrirse en un segundo
Para asediarte con el cuestionamiento
Como si el placer y el amor unidos
Le fueran un asunto del todo ajenos
Tu entrega eterna en amor vertías.
Así me cuento mi historia
Así la entrego como aquel dia
En que te entregaba a los ojos
Toda la pasión del romance y poesía.
En el cielo sólo me quedaba
Las responsabilidades de todos veía
Destruído Dios, destruida la Vida
A los brazos de la Dulce Muerte
Mi alma hecha fuego caía.
Manchas de estrellas, manchas recorría.
En el alma escrita la verdad
En los ojos el don de ser vista
Si no hay verdad, que la tierra sea mía.

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